Con información de: https://www.semana.com/economia/articulo/propiedad-intelectual-un-activo-que-hay-que-proteger/202200/
Así como el internet llegó a cambiar nuestras vidas, la inmersión del usuario en un mundo virtual aspira a configurar un nuevo paradigma en campos tan diversos como el trabajo, las finanzas, la educación, las compras, el entretenimiento y la interacción social.
En este sentido, el metaverso, las criptomonedas, las aplicaciones móviles y la inteligencia artificial son activos que tienen algo en común, y es la propiedad intelectual, ya que la defensa de la misma ha tomado un auge cada vez mayor en todo el mundo.
Cabe recordar que el metaverso es la réplica del mundo real en plataformas digitales, donde puedes hacer prácticamente lo mismo que realizas todos los días, desde ir de shopping, de compras al supermercado, tener una junta de trabajo, salir de fiesta con tus amigos, asistir a un museo o practicar algún deporte, pero a través de un avatar, pensando que realmente estás dentro de él e interactuando con todos sus elementos.
Y basados en esta nueva realidad, la protección de obras y nuevas creaciones digitales soportadas por sistemas blockchain ha incrementado notablemente, ya que esta tecnología, ha servido como herramienta de cadena verificable, transparente e ininterrumpida de las obras que se quieren proteger. De esta forma, autores y titulares pueden garantizar la autenticidad de los bienes, su pago seguro y una mejor trazabilidad en el mercado.
Sin embargo, el desafío radica por un lado en la regulación, pues la normatividad en protección de propiedad intelectual en América Latina aún no ha reconocido estas nuevas herramientas de manera explícita, y el segundo reto a superar por parte de los inventores es poder financiar sus solicitudes de patentes, trámites que pueden ser bastante costosos dependiendo del mercado de interés.
Pese a que existen ayudas como el Programa de Asistencia a Inventores (PAI) de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), el cual de forma gratuita apoya a inventores y microempresas en la redacción del texto de la patente y en su trámite en determinadas jurisdicciones, las opciones son escasas.
Sin embargo, ya se pueden evidenciar iniciativas como la del Colegio Ikigai, en el Estado de México, que basa su educación en una propuesta disruptiva que trabaja con entornos híbridos y metodologías como el Aprendizaje Basado en Proyectos, y para ello usan herramientas del Metaverso.
Asimismo, el metaverso aplicado al rubro inmobiliario, se está desarrollando en la compra y venta de terrenos virtuales, ubicados en distintos sitios administrados por empresas que ofrecen sus terrenos. Allí también se puede edificar y realizar varias acciones que recuerdan a la vida real y palpable.
Tal es el caso de la empresa Metaverse Group, que ha sacudido el mercado en los últimos meses. Dicha compañía, basada en NFT (tokens no fungibles) invirtió 2,4 millones de dólares para adquirir una tierra en Decentraland, un terreno virtual que ya se empieza a comercializar.
Finalmente podemos aclarar que, el metaverso es un mundo virtual muy complejo, que aún está en crecimiento y no se ha desarrollado por completo. De hecho, es difícil que en algún momento termine de desarrollarse, es probable que en todo momento esté en constante desarrollo, como la mayoría de las novedades informáticas y tecnológicas.